En uno de los objetivos propuestos en la Programación General Anual (PGA), se contempla el propósito de: “Concienciar y actuar en el cuidado y mejora del medio ambiente valorando especialmente el entorno más próximo”. Por tanto, es uno de los aspectos primordiales que debemos abordar a lo largo del curso.
Dentro de ese objetivo, una de las actuaciones contempladas es el fomento del uso de portabocadillos. En realidad, es una iniciativa que quedó aplazada durante el curso pasado.
Fruto de la colaboración de diversas personas vinculadas con el colegio, aprovechamos estas líneas para agradecer su labor, se han confeccionado 119 portabocadillos.
El día 22 de abril, jueves, se pondrán a la venta. Se ha calculado el precio para cubrir costes. No hay ningún afán lucrativo, ni de captación de ingresos adicionales. El precio será de 5 €/unidad.
Como no hay portabocadillos para todos los alumnos, se ha efectuado un reparto proporcional por clases. En principio, solo se entregará uno por niño/a y únicamente a los que traigan el dinero en ese momento. Si en algún aula hubiera más demanda que oferta, se sortearían. En el caso de que sobraran, se podrán adquirir más al día siguiente.
Además de la venta de los portabocadillos, se llevarán a cabo actividades complementarias que otorguen sentido a la iniciativa:
a) Un día, al azar, reuniremos en un montón todo el papel aluminio que envuelve los tentempiés del recreo. Haremos fotografías que podrán ser observadas en el blog del colegio. El objetivo es que se pueda apreciar, de forma gráfica, una estimación de la cantidad de papel aluminio usada diariamente en todo el centro.
b) El aluminio se extrae de una roca denominada bauxita. Aunque se encuentra en diferentes lugares de la corteza terrestre, sus principales yacimientos se hallan en zonas de clima cálido y húmedo, de alto valor natural. El aluminio es bastante costoso de obtener, ya que su extracción, transformación y elaboración, supone un consumo elevadísimo de agua y energía. Además, en cada uno de los procesos, se generan una gran cantidad de residuos tóxicos. A su vez, es un elemento que tarda cientos de años en descomponerse.
c) Cuando no quede más remedio que utilizarlo, una vez usado, se deposita en el contenedor amarillo. De este modo, puede ser reciclado.
d) Se pasará por las clases un trozo de bauxita, para que vean la roca de donde se extrae el aluminio.
e) Se proyectarán unos vídeos donde se muestra el proceso de obtención del aluminio. Se propiciará un debate posterior.
Esperamos que esta iniciativa tenga buena acogida entre la comunidad educativa. Insistimos en que lo fundamental no es vender portabocadillos, sino fomentar actitudes que propicien la reutilización, el reciclado y, en definitiva, la reducción de los residuos que generamos.